Silvia Martinez, la vecina de El Jagüel Campeona en el Uruguay y que sueña con correr el Sparthatlon

Hoy vecinos, compartimos con ustedes esta nota que le realizo la periodista Arianna Gomez a nuestra ultramaratonista Silvia Martinez de El Jagüel.

Cuando el sacrificio y la pasión son grandes, no hay obstáculo que no pueda ser superado. Quien puede dar fe de esto es Silvia Martinez de 39 años, que a pesar de las dificultades, se las ingenia para perseguir sus sueños.

La vecina de El Jagüel, barrio en el que nació y sigue viviendo actualmente junto a su hermana, es la única ultramaratonista de Esteban Echeverria y una verdadera referente del running en esa zona, que llego a competir en ultramaratones de 50 kilómetros.

El Campo de Deportes Santa Maria la vio dar sus primeros pasos hace 20 años y, fiel a sus raíces, Silvia sigue entrenando ahí. "Cuando tenia 19 fui al campo de deportes e hice 10 vueltas de 600 metros. Era la primera vez que corría y Carlos, el profe, me dijo que tenia condiciones , así que al año siguiente empece a competir" cuenta la mujer, que continua entrenándose con Carlos desde ese entonces.

Sus primeras competencias fueron de tres kilómetros, y le sirvieron a Silvia para probarse y ver cual era su fuerte. "Corrí velocidad y me di cuenta que no era tan buena en eso. Lo mio es hacer largas distancias, tiene mas que ver con la resistencia" relata la ultramaratonista. Pero su verdadero desafió llego cuando empezó a competir en carreras de 6 horas . El año pasado, Silvia demostró al mundo que es capaz de superar ese obstáculo ya que salio primera en su categoría en un Torneo Internacional que tuvo lugar en Uruguay, y quedo tercera en la categoría general de mujeres.

Para lograr el estado físico que le permite competir, Silvia cumple con una rutina diaria de tres horas y media de entrenamiento los fines de semana y una hora y media los días de semana. Ademas la dieta es un factor esencial: respetar las seis comidas del día se convirtió en su religión.

Todo ese esfuerzo, los entrenamientos diarios tienen un propósito claro: clasificar al Sparthatlon , una carrera de 36 horas que se realiza todos los años en Atenas, Grecia, en la que se corren 246 kilómetros. "Es mi máximo sueño. Me imagino que es la emoción mas grande estar ahí y representar a tu barrio, a la gente con la que entrenas ante todo el mundo", declara con anhelo. Para clasificar, Silvia debe conseguir los mas altos puntajes en los próximos torneos, para los que ya esta empezando a entrenar. A principios del próximo año correrá una ultramaraton de seis horas en Uruguay y a fines del 2018, 12 horas en un torneo en Balcarce. Luego el Sparthatlon.

Pero los desafíos a los que se enfrenta Silvia no se encuentran solo en las pistas. Los costos del equipamiento que necesita para correr y de los viajes para los torneos son muy altos. "Mi mama siempre me dice que no me desgaste porque voy a tener problemas de salud y después nadie me va a ayudar, y que es un deporte para gente que tiene mucha plata". Pero contra todo pronostico, Silvia demuestra que si se hace con amor y entusiasmo, no hay nada imposible. "Yo lo hago porque me apasiona, por los colores del Municipio , del barrio", afirma con orgullo.

La corredora trabaja como empleada domestica y, ademas, tiene sus propias maquinas de coser , con las que hace arreglos a la gente de la zona. "Con esos trabajos puedo manejar mis propios tiempos y me dejan ganancias. Todos los gastos médicos, pasajes para los torneos y equipamiento, lo pago con mucho esfuerzo. Voy de a poquito, con esfuerzo todo se logra", añade.

La satisfacción que le genera a Silvia correr es tan grande que lo hace hasta en las condiciones mas adversas. "He entrenado por horas bajo la lluvia, con calor y también con mucho frió", revela la maratonista que considera las carreras como un cable a tierra. "Cuando uno corre se siente libre, se llega a una meditación impresionante.

Ademas te da amistades, porque uno siempre esta corriendo acompañado. Gracias a dios me toco compartir con gente muy buena y solidaria".

Mas allá del Sparthatlon, Silvia sueña con transmitir a otros lo que ella tanto disfruta. A pesar de que no termino sus estudios, es partidaria de que nunca es tarde para hacer lo que uno desea. "Siempre me toco trabajar, pero el año que viene si o si termino la secundaria. Después me encantaría hacer el profesorado de Educación Física. Es un proyecto que tengo pendiente" concluyo.